Más de 2 mil cabezas de carnero momificadas que datan de la dinastía ptolemaica fueron descubiertas en el templo del reconocido faraón Ramsés II, en Abydos, al sur de Egipto.
Momias de ovejas, perros, cabras, vacas, gacelas y mangostas también fueron exhumadas por un equipo de arqueólogos de la Universidad de Nueva York en este sitio famoso por sus templos y necrópolis, anunció el Ministerio de Antigüedades y Turismo.
Ofrendas y culto a Ramsés II
Según el director del consejo supremo de antigüedades, Mostafa Waziri, estos descubrimientos permitirán conocer más sobre el templo de Ramsés II y las actividades que se desarrollaban entre su construcción -durante la 6ªdinastía del Antiguo Imperio (entre 2.374 y 2.140 a.C.)- y el período ptolemaico (323 a 30 a.C.).
Para el profesor Sameh Iskandar, jefe de la misión estadounidense y citado en el mismo comunicado, estas cabezas de carnero son “ofrendas”, que indican “un culto a Ramsés II” celebrado siglos despues de su muerte.
El descubrimiento podría ayudar a “restablecer el sentido del antiguo paisaje de Abydos, antes de la construcción del templo de Ramsés II”, agregó Iskandar.
Otros hallazgos en el lugar
Además de los restos de animales momificados, el equipo identificó vestigios de un palacio con paredes de unos cinco metros de espesor que datan de la 6ª dinastía, así como varias estatuas, papiros, restos de árboles antiguos, ropa de cuero y zapatos.
Ubicado a 550 km al sur de El Cairo, el sitio de Abydos es conocido por sus templos, en particular el de Séti I y sus necrópolis.
Este hallazgo “cambia lo que se estableció sobre el diseño del templo del rey Ramsés II y lo que se describió, pintó y circuló entre científicos e investigadores desde que se reveló hace más de 150 años”, afirmó Mohamed Abdel Badi, jefe de la Administración Central para las Antigüedades del Alto Egipto del Consejo Supremo de Antigüedades.
En búsqueda de nuevos descubrimientos
La misión completará el trabajo de sus excavaciones en el sitio para revelar más sobre la historia de este lugar, para luego estudiar con mayor profundidad los objetos arqueológicos encontrados.
Las autoridades egipcias anuncian regularmente descubrimientos arqueológicos de este tipo. Por ejemplo, la semana pasada, un grupo de investigadores egipcio-alemán anunció el hallazgo de la base de la estatua de Ramsés II y una esfinge en su honor, entre otras cosas, en la antigua ciudad de Heliópolis, en el Gran Cairo.